Las Navidades había que salvarlas, esa era la prioridad.
Las Autoridades sabían lo que había que hacer.
Y salvar vidas, o la Salud de la gente, debe ser secundario mientras no peligre "el sistema".
Somos muchos y no hay nadie insustituible.
Ya habrá tiempo si acaso para hacer el correspondiente y balsámico homenaje oficial a los caídos (daños colaterales calculados y necesarios).
Las medidas vemos que son exactamente las contrarias (por ejemplo: respecto a la vuelta a las aulas) a las que aplican países menos desarrollados como Alemania, Holanda, Reino Unido, etc, etc. pues estos carecen de nuestros conocimientos científicos y saber hacer.
Gracias una vez más, Autoridades... (y gracias a todo ese gran respaldo social que os facilita tomar tan valiosas decisiones).
¡Viva Castro Caldelas!
¡Viva España!
Vicente L. R.
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