Moción de censura. Hoy no hay crónica de la vergonzante función de un deplorable circo
"España se está autodestruyendo, poco a poco, lamentablemente..." nos decía ayer un ex dirigente político, de notable presencia en la recta final del siglo pasado. Y no es, precisamente, sospechoso de ser de derechas. Es probable que, como el piensen, no pocos españoles.
El show que durante dos días ha dado la clase política actual en el Congreso de los Diputados es el tristísimo retrato del odio, el enfrentamiento, la trapacería política, las posiciones irreconciliables... el lamentable estado de cosas al que se ha llegado entre la macedonia de partidos políticos allí representados.
La moción de censura presentada por Vox era contra el presidente del Gobierno, Sánchez. Acabó siendo al día siguiente un tremendo combate de boxeo entre Casado y Abascal. Y como esto hoy aún parecía poco, apareció en escena Iglesias en una maniobra preparada a conciencia y acabó sacando de sus casillas a Casado... Un caos total, en medio de hipocresías, viles alusiones, tonterías y trampas políticas.
Tras tragarnos toda la mañana este esperpento, con la televisión encendida, tras asistir a un espectáculo lamentabilísimo por parte de todos, esta tarde solo nos queda una opción realmente válida : no perder un solo minuto escribiendo una crónica de algo que no pasa de una gran farsa, la vergonzante función de un deplorable circo, la constatación de una tomadura de pelo a España y a los españoles.
¡En qué manos estamos!.