La Câmara Municipal advirtió que simbólicamente -también- hará llegar las llaves al Gobierno português en un afán de que se implique en medidas de apoyo a este sector.
El presidente de la Câmara de Braga ya anunció que de aquí a fin de año, los restaurantes de Braga no pagarán tasas ni licencias municipales, al tiempo que se les autoriza para ocupar espacios en la vía pública -también sin coste alguno- que puedan ayudar a desarrollar su actividad situando mesas con la debida distancia social.
Tiago Carvalho agradeció a Ricardo Río la buena disposición del município para con ellos, entregando no obstante un simbólico gran manojo de llaves al presidente de la Câmara y pidiendo la implicación del Gobierno de la nación en este asunto. El portavoz del colectivo de restaurantes de Braga mostró aún la esperanza de que entrado el verano, "se restablezca una cierta normalidad que permita que no solamente turistas portugueses, sino también nuestros queridos hermanos gallegos, en cuanto sea posible, puedan desplazarse libremente a Braga y ser atendidos con toda seguridad y esmero en nuestras mesas".
Imágenes en "Correio do Minho", de la protesta habida ayer en Braga.)
