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Sobre 25 años de maltrato ferroviario; Fernando Gomes, Carlos Príncipe, Felipe González y Cavaco Silva

La memoria puede fallar, pero espero que así no sea... Creo recordar que era 1994 entonces. En Madrid gobernaba como presidente, Felipe González. En Lisboa lo hacía como primer ministro, Cavaco Silva... Y entre Galicia y el Norte de Portugal existía una flamante entidad llamada Eixo Atlántico del Noroeste Peninsular (aún hoy en día existente, pero ahora convertida en una especie de café para todos, al albergar entre sus miembros a un batallón de pequeñas urbes, junto a las grandes de Galicia y el Norte portugués, que fueron las que constituyeron y dieron verdadero sentido en origen a este ente).

Los padres de aquel tal interesante Eixo Atlántico fueron el inolvidable Presidente de la Câmara de Porto, Fernando Gomes (que luego sería ministro y actualmente es el número 2 en la nomenclatura del F.C. Porto) y el que entonces era alcalde de Vigo, también inolvidable, Carlos González Príncipe. Ambos, con buen criterio y excelente entendimiento, idearon el Eixo Atlántico, al que de inmediato sumaron a alcaldes importantes de Galicia y Norte de Portugal (Pancho Cobián, Mesquita Machado, Paco Vázquez... y un largo etcétera de destacados munícipes que muy rapidamente apoyaron y participaron activamente en el ente recién creado). 

Eran tiempos áureos para el Eixo Atlántico. Había un gran entusiasmo porque aquello alcanzase un peso específico notable y se pudiese convertir en interlocutor eficaz ante los Gobiernos de Madrid y Lisboa. Y así trabajaron en aquel tiempo... Ayudaba mucho la gran amistad que trabaron Fernando Gomes y Carlos Príncipe. De la mano de ambos, Porto y Vigo no eran rivales en nada, sino incipientes colaboradores en todo, con grandes planos de tareas futuras comunes...

Pero volvamos a 1994, con el Eixo Atlántico en marcha. Un día se reunieron, una vez más, Gomes y Príncipe. El primero convenció inmediatamente al segundo : "tu que tienes influencia en el Partido Socialista español, mira a ver que nos reciba Felipe González y vamos a presentarle el Eixo Atlántico y uno de nuestros primeros proyectos...". Aquel día, Príncipe y Gomes tuvieron muy claro que un primer proyecto perfectamente realizable, era la modernización del tren internacional Porto-Vigo para convertirlo en banderín de enganche de la movilidad entre buena parte las urbes integradas en el Eixo Atlántico ( una línea entre Porto, Braga, Barcelos, Viana do Castelo, Vigo, Pontevedra, Santiago, A Coruña...). La idea de Gomes y  Príncipe era que aquel tren rudimentario Vigo-Porto (que sigue siendo hoy en día el mismo tren rudimentario) pasase a ser algo atractivo, imprescindible en el trayecto de siempre entre Porto y Vigo, para poco después poder extender la línea hasta Santiago y finalmente A Coruña.

En aquella reunión y otras posteriores dentro del Eixo Atlántico, los dos alcaldes que nos ocupan, pergeñaron hasta el último detalle en lo planeado. Gomes entendía que el trazado existente (el mismo que hay hoy en día) no era el mejor... Y aprovechando que entonces ya se hablaba de mejorar, modernizar y duplicar la vía entre Porto y Braga (cosa que se haría aún luego a partir del año 2.000), el presidente de la Câmara de Porto entendía que sería viable ir más allá de eso... intentar que se construyese un nuevo trozo de enlace ferroviario entre Braga y Barcelos para ya desde Barcelos enlazar sobre la vieja Linha do Minho, con Viana do Castelo y luego hasta Valença. Gomes pretendía que en el tramo Porto-Braga-Barcelos y hasta medio camino hacia Viana do Castelo, hubiese doble vía, con una infraestructura moderna que permitiese alcanzar puntas de velocidad de 180 kilómetros por hora en bastantes lugares. La idea pasaba también por mejorar en lo posible el trazado (eliminando curvas, suavizando otras) desde medio camino entre Barcelos y Viana y desde Viana hasta Valença... Ya por parte española se consideraba necesario mejorar el estado de las rectas entre Tui y O Porriño y Os Valos para también ahí garantizar esas puntas de velocidad de 180 en algunos tramos... El plan de modernización del ferrocarril Porto-Vigo pasaría por esas situaciones, a la espera de que el ferrocarril A Coruña-Vigo se modernizase también, de manera que el tren procedente de Porto, tras una escala en Vigo, pudiese en el futuro seguir hacia A Coruña, Santiago y Pontevedra.

Con gran entusiasmo, los del Eixo Atlántico fueron meses después a ver a Felipe González y al Gobierno de España, como también a conversar con Cavaco Silva y el Gobierno de Portugal... Estamos hablando de 1994... o sea, más de 25 años atrás. Aquellos apuntes, aquellos dossiers, quedarían sobre las mesas gubernamentales de las capitales de España y Portugal. Se habló de tomar buena nota e ir desarrollando aquello en los tiempos siguientes... No se desarrolló nunca nada, pese a insistencias futuras desde Galicia y Norte de Portugal. Esa fue la pura y dura realidad : cero patatero, no movieron un papel los respectivos Gobiernos centrales.

Recuerdo una conversación que por aquel entonces tuve con Fernando Gomes. El tenía las ideas muy claras. No le hablases de sueños irrealizables de TGV´S (trenes de "alta velocidad", "AVE´s")... Decía : "un tren de "alta velocidad" requiere inversiones costosísimas, su explotación es cara, la rentabilidad puede ser difícil, más en zonas no ricas como pueden ser Galicia y Portugal... La construcción de la infraestructura es muy cara, destruye mucho por donde pasa y estamos hablando de zonas de población muy diseminada en el trayecto entre Vigo y Porto... Por contra, un tren de "velocidad alta" (que no es lo mismo que "alta velocidad") que pueda alcanzar los 180 kms/hora de velocidad punta, es perfectamente viable, si mejoramos la actual estructura ferroviaria entre Porto y Vigo, aprovechando para crear una nueva y doble vía entre Porto-Braga y Barcelos y reconvirtiendo en todo lo posible luego la vía existente, Linha do Minho, entre Viana y Valença... eso puede ser un éxito y podríamos llegar alrededor del año 2.000 con un tren moderno, altamente atractivo y competitivo, entre Porto y Vigo, extensible en un futuro próximo a Santiago y A Coruña..."

Ni a Príncipe, ni a Gomes, ni al Eixo Atlántico le hicieron caso los respectivos gobiernos. Han pasado 25/26 años de esta historia. Hay una vía doble y relativamente moderna entre Porto y Braga, inaugurada allá por 2.003... pero no por hacer caso a lo propugnado en 1994 por Gomes y Príncipe, simplemente porque con la celebración en Portugal del Campeonato de Europa de Fútbol 2004, llegaron fondos europeos y se aprovechó para mejorar las infraestructuras que unían las ciudades-sede.

Es decir, desde 1994 en que se reivindicó por el Eixo Atlántico la mejora del ferrocarril entre Porto y Vigo, no se ha hecho nada de nada... Los Gobiernos de Lisboa y Madrid han estado mirando para otro lado y rascándose la barriga. Y ahí siguen, ad aeternum, viendo además lo sucedido en la reciente e inoperativa Cumbre Ibérica de Guarda.

Es triste, es duro, es amargo... es impresentable. Más de 25 años ignorando algo tan necesario y tan elemental es tiempo suficiente, más que suficiente, para decir -los que de verdad creemos en el potencial de esta Eurorregión- que estamos hartos de tanta inoperancia; absolutamente hartos. Y no hay pandemia que sirva como disculpa. Hubo un cuarto de siglo sin pandemia...

Tal y como reflejamos ayer, no hay razones de ningún tipo que impidan que Portugal y España hagan lo que en nuestro otro análisis reclamábamos (VER AQUÍ). Otra cosa es que les de la gana de hacerlo... Ni Galicia ha importado nunca mucho a los sucesivos Gobiernos de Madrid, ni el Norte de Portugal suele ser santo de la devoción del centralismo de Lisboa.





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