Hace semanas que los mercados de proximidad están cerrados y que bares y restaurantes dejaron de ser unos de los mejores clientes de los pequeños productores agroalimentarios gallegos. Desde entonces, en la Consellería do Medio Rural han tratado de buscar una salida a todos los productos cuya comercialización ha quedado paralizada. Primero se puso en marcha Mercaproximidade, una red que quiere acercar a los pequeños productores y a las grandes superficies para que estas comercialicen sus productos. Y ahora ha organizado el Superfeirón, la campaña con la que quiere animar a los consumidores a comprar producto gallego. Su objetivo es concienciarlos de la calidad de los alimentos que cultivan los agricultores y ganaderos de la comunidad, pero también hacer ver que incluyendo estos elementos en la cesta de la compra estamos contribuyendo a hacer viable el sector del campo.