La sorpresa para Casillas llegó a los postres de la comida celebrada en un restaurante de Vila Nova de Gaia. Allí, sus compañeros y los que también han sido sus entrenadores, todos, le hicieron entrega de una medalla conmemorativa del título de Liga que habían guardado expresamente para el, para dársela a quien el corazón traicionó e impidió su vuelta a los terrenos de juego como bien habría deseado.

En Internet, emocionado, Casillas agradeció el detalle de sus compañeros del FC Porto, tras haber posado todos juntos con la Ciudad Invicta al fondo del grupo.
