lunes

Reflexiones por teléfono

Por teléfono, un largo rato, un amigo que acaba de jubilarse, me decía horas atrás que estaba harto; que no aguantaba más la televisión; que había errado en machacarse todos los días prestando atención  a esas conferencias de prensa, comparecencias o lo que sean, que protagonizan los que detentan el poder y los que dicen ser la oposición.
-Además de la cabeza como un bombo, las contradicciones, un día que si, otro lo contrario...
Mi amigo, persona sensata donde las haya, ha optado por comenzar, dentro del obligado retiro, "una vida nueva", dispuesto a ser permeable solo en lo indispensable, dispuesto a valorar las pequeñas cosas de la Vida, a distinguir lo que verdaderamente importa y a apartarse del tener que tomar nota  de "tanta mezquindad política, tanta indecencia, tanta incompetencia".
Mi amigo, me decía anoche, y es posible que esté en lo cierto : ya llega con el coronavirus como gran amenaza para nuestras vidas, como para encima andar angustiándose todos los días, con memeces, incongruencias, incoherencias, tics autoritarios... del fulano que sale cada dos por tres por la tele.
( EMILIO FRANCO