Desayuno de Feijóo en el reino de Abel, el de "la Xunta nos roba"
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Fue Feijóo a Vigo a darse un desayuno de masas, de esos en los que no faltan pelotas ni simpatizantes, que abrazan hasta las farolas. El hombre, se sintió tan a gusto que la emprendió con el que antes tantas veces la había emprendido con el. O sea, Feijóo, esta vez, le zurró de lo lindo a Caballero, a las luces de Navidad y al canto permanente a lo efímero que protagoniza el pontareano. Y en contraposición, puso lo hecho por la Xunta en Vigo, en obras de esas que no lucen a primera vista pero son para muchos años, claro está. "Hemos hecho obras que quedarán para siempre, no los pequeños detalles que están bien, pero una cosa es la decoración y otra lo es la casa. Y si no hay casa, la decoración no existe", expresó Feijóo.
"No concibo la política como la propiedad de nadie, ni los proyectos como una limosna que la gente tiene que agradecer eternamente. Una mayoría absoluta no significa tener la propiedad de las ideas y los proyectos, sino la humildad de intentar contentar a esa mayoría, y si es posible, a una mayoría mayor", proclamó en el púlpito marítimo de Vigo, el candidato de los populares a la Xunta.
Y acabó por hacer un simil : "Si ustedes van a Cataluña los independentistas les dirán que España les roba; y si es en Vigo, (los caballeristas) les dirán que la Xunta nos roba". Y de esto tiene buena culpa también Feijóo, que dejó, en el caso de Vigo, como los Gobiernos de España en el caso de Cataluña, que se repitiese mil veces la cantinela, creándose una especie de convencimiento en no pocos de que las cosas eran como Caballero repetía... Y Feijóo ha sido culpable de eso, porque durante años sostuvo en el PP local, en la Oposición en el Concello, a no pocos(as) inútiles, incapaces de explicar a la ciudadanía que lo afirmado por Caballero no era realmente así... como este hombre contaba. Y ese tragar, ese cruzarse de brazos durante años, ha llevado a lo que ha llevado, a que el PP ahora, en Vigo, luche ahora contra corriente por no haber sabido reaccionar a tiempo.
"No concibo la política como la propiedad de nadie, ni los proyectos como una limosna que la gente tiene que agradecer eternamente. Una mayoría absoluta no significa tener la propiedad de las ideas y los proyectos, sino la humildad de intentar contentar a esa mayoría, y si es posible, a una mayoría mayor", proclamó en el púlpito marítimo de Vigo, el candidato de los populares a la Xunta.
Y acabó por hacer un simil : "Si ustedes van a Cataluña los independentistas les dirán que España les roba; y si es en Vigo, (los caballeristas) les dirán que la Xunta nos roba". Y de esto tiene buena culpa también Feijóo, que dejó, en el caso de Vigo, como los Gobiernos de España en el caso de Cataluña, que se repitiese mil veces la cantinela, creándose una especie de convencimiento en no pocos de que las cosas eran como Caballero repetía... Y Feijóo ha sido culpable de eso, porque durante años sostuvo en el PP local, en la Oposición en el Concello, a no pocos(as) inútiles, incapaces de explicar a la ciudadanía que lo afirmado por Caballero no era realmente así... como este hombre contaba. Y ese tragar, ese cruzarse de brazos durante años, ha llevado a lo que ha llevado, a que el PP ahora, en Vigo, luche ahora contra corriente por no haber sabido reaccionar a tiempo.
BERNARDO de OSÓRIO